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Categoría: Poemas de la sombra

Poemas de la sombra. Que surgen del inconsciente, de lo que está oculto, de lo que no queremos ver.

No juzgues

No juzgues

La realidad es inmanente;
un pozo de agua fresca,
soluto y disolvente,
un régimen emergente
sin ententes
ni continentes,
óxido del éter
nacido para siempre.

Un dodecaedro dorado
que no fue forjado,
con tantas caras
y tantos lados
como seres creados.

Es una corriente
de agua bendita
que no necesita
ser bendecida,
porque resucita
y regurgita
un montón de maravillas.

Porque nunca se hizo trizas
pase lo que pase en la mirilla, 
y por mil veces que lo dividas:
¿Qué es una ecuación
sin solución?
¿Qué es un teorema
que se enreda?

Quítate los ropajes
de la mente
y sumérgete en detergente,
porque allá abajo
en las caricias del sustrato
no hay dolencias
ni eccemas
ni nada que duela.

Hay una selva
de quietud y presencia
sin indirectas,
los cultivos de la siembra,
el fin de la niebla
y lo que requiebra.

Una puerta
que es puro ecosistema.
Jardín de luces y sutilezas
que habla la lengua 
de la conciencia.
Es abierta y multicierta,
por sus manchas de colores
y polifacéticos olores.
Porque trasciende lo informe
y se presenta al ojo miope.

Una mirada de arlequín
para captar el sinfín,
un palanquín danzarín
que se sustenta en el devenir.

No juzgues,
no quebrantes
en miles de partes
y millones de cristales
Harán que te alces
y estés distante,
un verdadero dislate
para ser alguien,
ya seas rey o paje
estarás al margen.

La realidad es cauce
del mismo instante,
universo totalitario
que se expande.
Pero no serás consciente
sumido en tu traje,
libérate del tonelaje
mira al centro de la imagen,
al ser constante
que ahora se reparte.

No juzgues,
No juzgues más, diantres.
Rompe el embalaje
y sumérgete en este lance;
no hay más tarde
ni tampoco antes.

Gracias por la foto jplenio

Dedos apagados

Dedos apagados

Línea divisoria
en la franja mortuoria,
un espacio divido
en un mundo arquetípico.

Y vi una escalera
hacia el cielo,
era para alguien
vestido de negro.
Dudaba en el desconcierto,
se supeditaba al cuerpo,
al no duermo,
al me quedo quieto,
y tengo mucho miedo.

¿Por qué te zambulles
en ese agujero?
¿Por qué desoyes
los misterios
y sucumbes
a lo incierto?

No hay problema
con el duelo,
no hay problema
con el sueño
del que asume el ruego
«¿Y si me enredo?
¿Si vivo en el encierro
y ya no hay dueño?»

Rompe tus cadenas,
libera tus venas,
conmuta tu condena
y sal de ese pozo de culebras;
son como agarraderas
para estilizar una vida
forjada de creencias.
¿Pero son ciertas?

Llegas a tientas
por la línea de lo indivisible
en busca de lo asible,
más no hay espacio
en toda la psique
como ya te dije.

Siéntete libre
y anda ya el camino
más allá de lo posible,
más allá del contigo
y del yo te digo,
hacia ese pasillo
que está lleno de brillo
y no corresponde a los vivos.
Allí viven los antiguos
y todos los designios,
y te están esperando
tus seres queridos
formando un corrillo;
contando historias
de cuando eran chiquitos.

Y ven el viento
soplando de ladillo
y una hojarasca
de matorrales y pinos
que hace cosquillas
a los transeúntes dormidos.
Una canción sin estribillo,
un rey visigodo
sentado en su tronillo,
todos penden
del mismo hilo,
largo e infinito,
donde las historias
se fundamentan
como una correa
o una buena nueva.

¿Hay principio o fin
para esta historieta?
Ya libera tu memoria
suelta ya esta hora insomia
y concilia la gloria,
realza tus manos torcidas
para que vuelen
en medio del clímax.
No hay ala perdida
ni consciencia desconocida,
sino realidad nutriente y viva
que sintoniza esta alegoría.

Déjate de evasivas
y mira hacia arriba,
eres muy querida
desde niña.
Pero tu piel esta marchita
y tu sangre no dulcifica,
así que pisa
sin ir de prisa
la singular cornisa
de la entidad misma.
Música de sinfonía,
arreglos de mandolina,
hay un silencio
del que nacieron
las almas del cementerio.

Ya no hay tiempo
suelta los dedos
que vuelvan a ser rectos.
Comprende el Eros
y el misterio,
y emprende el camino
con todos tus recuerdos
en tu último aliento.
Al otro lado te esperan
los que vivieron
con los brazos abiertos.

Gracias a StockSnap por la foto

Gracias por todo…

La visión

La visión

Miro al ogro
que tengo en el ojo,
es como un pozo
que está lleno de lodo.
Es un esbozo
de puro enojo
y de tanto gritar
se pone rojo.

“¿Qué te enerva
en mitad de fiesta?»
Escucho por sorpresa
de una voz lastimera
pero llena de fuerza.
Tiene cierta sutiliza
que encarama la tristeza.

Veo los dos polos,
con un oído sordo,
escucho sombras
en injerencia amorfa.

Y le pregunto
de manera sonora,
casi con zozobra:

¿Qué es ver?
¿Qué es ver?

«Ves con los sentidos,
ves con los conos
y los bastoncitos,
ves el mundo definido
que está entre el iris
y el cristalino;
ves lo que parece sencillo,
ves el conjunto y lo repartido
ves en el espejo,
en medio, un daguerrotipio.

¿Pero es todo un espejismo?
¿Y lo contenido?
¿Y lo que en un vistazo
no es visto?
¿Dónde están los reflejos
del arquetipo?
¿Dónde estás los espejos
del sentido?
¿Ves lo esquivo?
¿Ves las paredes
de lo fidedigno?

Lo que ves es un lío
porque estás lleno de juicios;
es un pellizco en el ojo
que se queda aturdido,
mientras miras al Olimpo
que parece escondido.

Ya elimina todas esas ideas
que están muertas,
y llora por tu cornea
para limpiar esa mancha negra.
Es una columna mortuoria
en una infección arenosa.

Tienes que mirar hacia el centro
hasta estar contento,
donde no hay sujeto
ni objeto,
solo un único sello
que nunca fue devuelto.
El envío primero
y el primer recuerdo,
donde todo es neutro,
todo es epicentro,
y está en movimiento.

Por eso no ves las formas,
ni los laterales,
espejos radiales
en difracciones espectrales
que rompen el telemetraje.

Mira pa dentro,
mira de pleno
como si entendieras el Boceto
ese enigma del sueño,
una nota de polvo
que adquirió peso.

No hay trazo correcto,
no hay mejor argumento,
no hay sonido bueno,
ni paráfrasis luego.

Quédate quieto,
en el centro,
donde el ojo converge
sin esfuerzo,
la imagen se plasme sola,
sin bruma, ni luz de cola.

Cuando la línea se distorsiona,
cuando se muestra el andamiaje
y se abulta el margen,
todo queda delante.

Justo en este instante
que es de alto voltaje.

Es la visión que no es di-visión.»
:)/:)

Gracias jonaszara por la foto

Animales de poder, animales en tu ser

Animales de poder, animales en tu ser

Animales de poder, animales en tu ser… Nuevo episodio de Paseos Primitivos… sobre el salvajismo, las fieras que habitan en tu interior, los animales que rugen… la quietud, el bálsamo y el estanque… con mucho humor absurdo y mucha poesía y con la vuelta del gran Paulino tras su paternidad… 

Aquí tenéis un enlace para escuchar los episodios anteriores del Podcast: Paseos Primitivos

Y si queréis hacer algún comentario, hacernos existencial o compartir alguna anécdota paralizante podéis hacerlo siguiente email: cantosprimitivos@gmail.com

La puerta

La puerta

Se abre una puerta
que tiene tintes de acuarela;
es inmensa y se requiebra.
Salmuera e intensa
posee esmaltes de piedra
de épocas pretéritas,
más es nueva.
Está llena de riquezas
y de muchas pruebas,
digna de la providencia
para el que de verdad apuesta.

Se elevan las ciegas
por miles y quinientas,
ya están dispuestas
todas en la mesa
mientras la puerta parpadea
y enseña una ruta heliocéntrica.
Antropocéntricas son la miserias
del que no juega,
pues tiene un montón de cefaleas
y se estremece en la cuneta
de la indiferencia.
No hay más descaro
que mirar al ópalo
y al cristal cóncavo
antes de echar el órdago.
Así que apuesta
y multiplica por miles y centenas.

Y crucé la puerta
de la realidad heliocéntrica,
cúspide de la pirámide
con verdades como ábsides
en la que no faltaba un ápice.
Estaba en el escalafón máxime.

Y apareció un rayo vestido de traje,
era hijo de las Mariánides
para cantarme las Pléyades:

Te has adentrado a la realidad dorada,
donde el aire es puro plasma,
solo con alzar la palma
este directamente cambia.
Es pura savia
de sencillez áurea,
metalurgia transmutada
en una fórmula condensada.
La realidad deseada
en certidumbre con la magia,
puedes apostar cualquier cuantía
que siempre se multiplica.
Llanura en sí misma
que parece que levita.
Pero tienes que estar atento
pues no todo es cuento
las leyes de la atracción
son por cientos
y cuanto más me muevo
más me acelero.

Deja un espacio interno
para el sosiego,
para que siga el juego
sin perderle el respeto,
pero no dejes de apostar,
no dejes de caminar
por este valle suculento;
es el último nivel
del que yo me acuerdo.
Palacio de apogeo
donde sigue el recuento,
el yo me divierto
y sientes los vientos
que colman el deseo.
Son dorados y acristalados,
son el último cimiento,
donde yo me veo.

No tengas miedo,
este es tu juego.
Puro experimento
donde no entra el apego.
Has llegado al nivel supremo.
¿No ves que todo es bello,
con un toque polinesio?

Y seguí andando en ese mundo
esférico, metaplámastico y sincero.
Torrentes dorados,
espacios llenos de halos.
Posibilidad de posibilidades,
todas a tu alcance.
No había dictamen
ni tampoco certamen,
solo goce más allá
de cualquier margen.

Gracias a cmarinalbert por la foto

Suma Inteligencia

Suma Inteligencia

Eres suma inteligencia
y pura presencia,
el que rompe la inercia
y la apariencia…
Manantial de encomienda
sin urgencia,
te expresas con contundencia
en los albores de la novena puerta,
pero no eres naturaleza muerta,
ni conciencia que no despierta.

Hay túneles… tinieblas…
Hay una tendencia cargada de indiferencia
pero es solo miedo
hacia lo incierto
a entrar en el desierto 
y conocer lo que quiero.
Aquí me presento,
no puedes ser un injerto
ni un mausoleo,
tienes un acuerdo
con los cuatro elementos,
no vives en un sueño,
ni bajo cuatro metros.
También tienes cuerpo,
crees que con vivir
ya eres peso muerto
y que el universo
es sumo desconsuelo,
pero esto no es cierto
ni tiene fundamento,
te conviene creerlo,
es más fácil si es un cuento…

¿Para qué hacerlo?
¿Para qué arriesgo?,
si no hay nada eterno,
todo es una mentira
del hidrógeno al helio;
nada es nuevo.
Todo está hueco
y lleno de pellejos.

Pero hay una brisa
que limpia las heridas
y la piedra cobriza
entre todas las desdichas.
Es una mano infinita
que entreteje caricias
y también alivia.
No hay nada hecho trizas
ni torrente de almas perdidas.
No existe esta oscura sima
ni esta falsa mentira.

Quieren que eso creamos
que somos pantano desolado
y que estamos derrotados,
más no lo estamos,
formamos un halo
que extiende la mano
hacia el mismo lado.

No más postulados
ni pensamientos mecanizados
no más artefactos,
ni utensilios automáticos.
Hay un sentido kármico
en el cosmos cuantizado,
contingente contra el pánico
y ariete balsámico.

De fondo se oye una voz
que conduce al corazón,
estruendo y ardor
con mimbres de canción.
Una especie de tensor,
el último rotor
que produce la acción,
libera la razón
de la quinta colisión,
fenómeno de destrucción
de toda ilusión.

Se deshace el mundo dividido…
en que todo es escrutinio…
Sello de lo nativo
y recuerdo del olvido,
como cuando eras chico
y todo tenía sentido.
La vuelta al Eliseo,
y al paraíso.
Único destino
del universo derretido.
Tú y tú mismo
sin artificio;
un anillo constitutivo,
como un monolito
que pone fin al armisticio.

Gracias a Geralt por la foto

Vídeo: Vacío infinito y reflexión

Vídeo: Vacío infinito y reflexión

Poema sobre atreverse, extender la mano, el momento, recoger los premios y exponerse, no tener miedo… el cambio es inherente a la vida… Hay que buscar lo que hay dentro de nosotros y encararlo… la vida es un poco… mostrar lo que tenemos.

Si quieres leer el poema, puedes pinchar en este enlace:Vacío infinito.  Mucho Primitivismo

Vacío infinito

Vacío infinito

Veo una bola infinita
que está llena de vida
y me grita
y me insta
a que salte de la cornisa,
es un viaje de ida,
un viaje a la cima,
un cambio de clima,
es asomarse al clímax
a lo que tiene miga
y a la apuesta divina.

Vida sin lentillas,
cortapisas o parabrisas,
sin la mirada perdida;
vida que es vida,
vida que es consigna,
vida en sí misma,
vida para la vida,
vida que te conmina,
vida amiga que te
lleva hacia arriba.

Vida que está llena
de perseidas cristalinas,
enormes bombillas
que bombean desde la angina
un montón de hemoglobina.
Porque ya rebobinas
y comprendes entre bambalinas.

El gran secreto de la cortina,
cortina quemada
de luz merovingia,
hematíes en fila
en suma algarabía.
Calidoscopio que se arremolina
junto a las tripas
y crea una vertiente ventrícula.

Vida ya misma,
músculo de pericaricas
que me insta
a la consigna
que palpita
los sueños de Artemisa.

Inspira…

Vida sin cateterismo.
Un yo conmigo mismo
donde soy testigo
y protagonizo.
Ando el camino
sin que sea torcido.
El yo que he elegido,
diástole y destino
sin miedo al peligro,
sin nada dividido.

Un estruendo colorido
y fuego  conspicuo
que marca el periplo
del salto al infinito.

Gracias a geralt por la foto

La barca

La barca

Veo un estanque
en medio de un agujero,
está lleno de heno
tiene hedor a puerco
y en él se arremolinan muertos.

Y hay un barquero
que no tiene cuerpo,
es como un lucero
de los vientos de invierno;
se compone hacia dentro
y habla con esmero.
Y aunque tiene una calavera
que se escapó de un convento
sabe todos los secretos.

—Y me dice, señor
está usted muy pétreo,
tiene en el corazón
como un cerco,
una valla repleta de estiércol.

Y yo me revelo,
desde luego.
—¿Quién es usted pordiosero?
¿Quién es usted, putrefacto
y endiablado Barquero?

—Solo soy la voz de otro tiempo,
el susurro de los muertos,
y del suspiro longevo.

—¿Quiere que vayamos al infierno?
—Pero ese el camino eterno.
—Una ruta llena de burlas.
—Pero allí verá a las brujas y las musas.

Y navegamos hacia el destierro,
la vida parecía un encierro
pues se replegaba en torno al miedo,
curva, hacia dentro.
Tenía el torso desnudo
lleno de plantas y musgos.

—¿Quiere que haga un requiebro?
—¿Y si perezco?
—Ya estás muerto.

Y vi un muro negro
lleno de cieno,
una especie de injerto
que se hacía espeso
y hablaba desde mi yo interno.

“Estás en los huesos;
emerge del desconsuelo
y de lo incierto.
Eres como penumbra
llena de amargura
que busca una bula,
pero aquí todo es bruma.
Una canción de cuna
de esas que susurran,
ululan y te abruman.
No hay hambruna.
Desata tu furia
y deja las calumnias.
La forma siempre se conmuta,
es una balanza
en contingencia exacta,
no es razón abstracta,
ni absurdo ni alabanza.
Es el origen del karma
y de la entidad pesada.
Pero si miras con la mirada
verás que allí no hay nada,
solo formas vacías
de conciencia infinita
que quieren saborear la vida
y quiere ser vivida.

Porque es ella misma.
Es prístina e intelectiva,
nota básica de la polifonía
percibida por las dendritas
y por toda la melanina.
Es así de irreflexiva
pero no va a la deriva.”

Y no me había dado cuenta
pero había llegado a la otra orilla
tras escupir en la neblina.
Había una luz corrosiva,
una estampida verde y amarilla;
una vieja cara conocida
que del todo sonreía
conocía de sobra
mis protestas y misivas.

Alma de mi alma mía
fuerza sucinta
que siempre ilumina
como un prisma.

Gracias a Papafox por la foto

Te vi en otra vida

Te vi en otra vida

Veo un águila
que sobrevuela la llanura.
Tiene el pico naranja,
la piel amalgamada
y cuenta la leyenda
sobre unos nómadas
que se movían en hordas.
Deambulaban por la tierra
sin una ruta cierta,
un viaje de encomienda
que se mantenía sobre dos piernas.

Te vi en otra vida
cuando eras una niña,
estabas perdida
tras la mirilla.
Ahora eres una mujer
preparada para el placer,
un completo orgasmo
que está lleno de espasmos.

Una realidad de viñetas
que llena tus caderas,
libera tu alma sureña,
que a la tierra alimenta.
Realidad de placenta
tras varias vidas muertas.

Ya no hay parálisis,
te envuelve el éxtasis.

Pero aún recuerdo
cuanto te envolvía con mis pieles,
no sabíamos de continentes
y había muy poca gente,
pasábamos hambre,
vivíamos para la Madre
en las noches ancestrales,
tocábamos la luna
con los pulgares,
y palpitábamos en la sangre
pues no había pensamiento
ni castigo, ni nada definido,
solo sigilo,
noches de olvido
donde cantabas al vacío,
con tu voz de mirlo.
Poderos solsticios,
sin cobijo ni abrigo,
solo grito,
piel con piel,
aliento compartido,
imágenes, poderío,
fuegos y estribillo
noches de garganta,
en grutas que amamantan,
unos pocos años,
lobos en camada
agolpados en la roca,
una vida corta
llena de estrofas
y de congoja.

Te fuiste mi vida
por razones desconocidas,
solo teníamos dioses
fuegos y folclore,
y el canto a los soles;
no éramos pobres,
y no había complejo orden.

Te fuiste entre dolores
mientras ibas susurrando
canciones a los hados,
yo te agarraba la mano
acompañando tu canto,
una serena melodía
que hablaba sobre tu vida.
Elipsis y alquimia.
Una muerte digna
que me dejó hecho trizas.

Y te recordaba por las noches
en la penumbra de azogue,
un sentimiento de morgue,
un rito de estertores
mientras miraba el horizonte
un intenso fuego
que emulaba tu recuerdo.

Los años pasaron
bajo la mirada de amaranto,
historias sobre el letargo,
un pasado lejano
donde nada fue en vano.
Leyendas de anciano
con suave color magro,
el tiempo se ha condensado,
quizás sea indeterminado,
por eso te cojo la mano.

Gracias por la foto a MemoryCatcher

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