Vídeo sobre el poema Los Hermanos Celestiales… sobre la riqueza, el oro y ayudar a los demás. Con mucho mar y mito, donde los hermanos, símbolo de los pares tienen un gran viaje. El mundo se mueve y la consciencia también.
Os comparto también el enlace del poema por si queréis leerlo: Poema
Vídeo sobre el poema Amor a Madre Tierra; llegada a un nuevo país lleno de exotismo y aventura; ademas de mucha riqueza y oportunidades. Conexión con Madre TIerra, con su fuerza, con el barro, con el movimiento y con la energía.
Ya he llegado, tras un largo viaje por uno de tus costados, a la tierra de palmeras y animalitos colorados.
Te he echado de menos, madre, por tu sabor saldado y tus dulces manos, y por esa leche de tuétano que es un néctar calmo.
Y yo me ufano, madre en buscar entre la tierra todo lo que es dado, una columna entera de tu sello magro, porque nos alimentas desde antes del parto, éramos seres cósmicos y esbozos nonatos.
Yo te quiero madre, te quiero aquí a mi lado, por eso te he buscado desde que era chico y enano, para pedirte caricias profundas e infinitos abrazos.
Yo te quiero madre, te quiero, soy hijo de tu costado.
E intentó hablar desde lejos, no había silencio sino arpegios y diminutos cuantos de conocimiento; que la envolvían como una esfinge dentro de la selva Virgen…
Y llegó andando desnuda con toda su hermosura y con pliegues en su piel rosada que eran como la nieve blanca.
Y me dijo muy cerca, casi abriendo la puerta:
“He seguido la senda de los nibelungos y he visto 300 mundos, pero ya no queda ninguno todos han sido derruidos como mi amor y el tuyo.
Pero hay una escalera que lleva a la azotea y en ella podrás ver todo lo que cuenta.»
Y subí a las esferas para ver todas las puertas, todas las realidades algunas descomunales.
Pero solo podía verla a ella lejos en la tierra, entre bosques y maleza.
Y pedí un deseo que era como un amuleto y estaba hecho de fuego
“Suelta, suelta y haz de tu realidad terrena mil vidas paralelas.”
La vi de camino hacia Casiopea toda esbelta llena de hermosura rosada y desnuda. Era una estrella que brillaba eterna.
Y le dije adiós con la mano mientras acariciaba los astros estaban todos tan altos, ardientes y relajados.
Y miré profundo en la tierra para ver la imagen de mi conciencia. Estaba allí prieta, despierta, haciendo un juego de manos frente a una estafeta.
Y me marcó un camino de piedras, todas de colores y algunas negras, que hacían un círculo al final de una escalera. Así que subí por ella, hacia el cielo dando saltos con las piernas. Y vi la imagen de una verbena de espíritus de la trastienda, todos vestidos en plata en pos de una quimera.
Y me cantaron: “Deja ya las bagatelas, y anda por la hacienda que está llena de riquezas y de muchas otras fiestas”
Y alcancé el sol con un mestizaje de epopeya; y muy dentro, en su interior vi una luna repleta. ¿Cómo era esto posible? ¿Es posible que no entienda? Y se unieron los dos como si fueran una pareja. Una fusión del fulgor que rompía las barreras. No había ella, no había yo, no había armazón, ni tampoco esquema. Solo una luz multicolor que coloreaba la escena.
Y estábamos todos en la visión, todos en la trastienda. Éramos todos el mismo ser; una única consciencia, que estaba hecha de amor y nutría la existencia.
Y extendí un dedo y noté todo su calor del brazo a la cadera y lo sentí en mi interior desde épocas pretéritas. Nunca me había abandonado nunca vagué por cuenta ajena. Toda la separación era una ficción construida por mi cabeza. Y allí en mis venas encontré toda la creación desde la luz del sol hasta el rostro de la luna llena.
Gracias a Jongsun Lee por la foto
Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.plugin cookies